Redigram es una distribuidora de vinos. Tiene una cantidad importante de bodegas en su portfolio, todas buenas, todas recomendables. Y tuvieron la idea de hacer una serie de degustaciones con lo más alto, elevado, engalanado de las que vende. A ese proyecto lo nombraron Wine Tasting by Redigram Top Tour 2016. En concreto una serie de catas a ciegas y guiadas de nueve etiquetas tope de gama, vinos ícono, premium y ultra premium. Gran idea de don Fernando Depetris.
Como me gusta el vino y el Gran Capitan Kaller me avisó, no lo dudo y me mando con todo el entusiasmo. No todos los días se degustan éste tipo de vinos al mismo tiempo y en un mismo lugar. Una después de la otra y sin ver. Cosa de que el prejuicio no nos gane la partida.
La cita es el la esquina tradicionalísima del vino de Paraguay y Pasco. Rosario Vinos Exclusivos nos abre las puertas para ésta cata particular.
Tenemos una presencia importante en el evento. Está el Capitan, está Gustavo Tomassoni, el Sommelier del Pueblo, está Penélope Glamour (alias Marcela Martinez) y está el cada vez más jóven Dani Badalassi, con lo que entramos en cerrada formación para disfrutar del asunto.
Dirige la degustación el sommelier Octavio Zannarello con su estilo particular y personalísimo. Es un gusto escucharlo y seguirlo. Sabe el hombre...
Arrancamos entonces. Son nueve vinos, tenemos una planilla frente a nosotros. Hay que darles puntajes y describirlos en pocas palabras. Al final de la ronda inicial, elegimos tres que nos vuelven a servir y de allí elegimos el mejor para cada uno, que nos llevaremos a casita.
El primero ya me gustó. Buen color, no muy concentrado. Aromas primero frutales y lácticos. Frutas rojas y algo así como un durazno le siento, acompañado con notas a chocolate blanco. En boca es franco, fresco, con una acidez muy bien puesta, tomable, agradable, equilibrado y rico. Frutado también en boca, una buena presencia tánica y refrescante final. Más tarde Octavio dice que quizás le falte botella todavía. Puede ser cierto, me parece un vino que va a desarrollarse con el tiempo, pero esa expresión vivaz que tiene hoy en día lo hace muy disfrutable. Me gustó mucho el primer vino, lo elegí entre mis tres preferidos al final. Se trata nada más y nada menos que del Marcus Gran Reserva Cabernet Franc 2014 de Bodega Humberto Canale.
El segundo vino ya tiene otro aspecto. Es mucho más concentrado en color. Se mueve más pesado en la copa. Aromáticamente es intenso. Expresa una mermelada de ciruelas o frutillas muy machaza, concetrada, expresiones lácticas de su paso por madera, como chocolate amargo, toques apenas especiados. Después me aparece una nota dulce, como a "chicle". En boca es goloso, dulzón, casi empalagoso, muy untuoso y potente. De pasar suave y final muy largo. Un vinazo! El segundo fue señores el Foster Firmado Malbec 2010, ícono de la Bodega Foster y un caño.
El tercero no se queda atrás en concentración. En nariz aparece una nota floral junto a la mermelada, parecida al anterior. Acompaña una nota a café bastante intensa cuando se va abriendo, tiene una nariz muy golosa. En boca es de estructura media a alta, una entrada intensa, un poco tánico, una acidez bastante presente y un final largo que deja un retrogusto a café. Comparto con el capitán que a éste sí hay que esperarlo un tiempo más, porque todavía está un poco guerrero. El tercer vino es otro ícono, corte de Cabernet Sauvignon, Malbec, Petit Verdot y Cabernet Franc y se trata del Henry Gran Guarda N° 1 2011 de Bodegas Lagarde.
El cuarto es más amable. Concentrado también, en nariz viene con violetas frescas y ciruelas bastante maduras. Aromas dulzones y toques de orégano. "Si no es un malbec... " anoto en la libretita. El paso por madera también es evidente en notas tostadas. En boca es entrador, rico, medio dulzón al principio. Llena con una untuosidad agradable y tiene un final largo con recuerdos de violetas en el retrogusto. Da ganas de tomarlo. Pasa con todos los vinos de ésta bodega, es su personalidad. El cuarto es el Obra Prima Colección Malbec Gran Reserva 2011 de Bodega Familia Cassone.
El quinto es otra cosa. Ya desde la copa se nota la evolución. Tiene esos colores terracota que dicen que ha pasado largo tiempo desde que se embotelló. Anoto aromas. Hierba húmeda, café, membrillo, ceniza, algún toque mineral, especias, sobre todo especias mientras se va abriendo. Dulzon y espeso, pero agradable de oler. En boca es una seda, medio dulzón al principio, pero elegante, exquisito, disfrutable. Tomable, para descansar y dejarlo expresar. Una ricura evolucionada que fue mi segundo elegido de la noche. Se trata del Nómade Las Mulas Vineyard Syrah-Malbec 2007 de Tomás Achával. Estos vinos son geniales.
El que viene adelanto que es que que está en casa. Buena pinta en la copa, con músculo. Aromas ahumados, a café torrado, a frutas rojas, evolución en aromas dulzones, toques mentolados que lo hacen muy fresco, aromáticamente exquisito. En boca agradable, muy disfrutable pero con una acidez fresca que lo hace más tomable aún. Muy bueno, de alta gama evidentemente, pero en una búsqueda no tan concentrada como los anteriores. Me gustó y elegí el Lorca Inspirado Blend 2009 de don Mauricio Lorca, un mago de la enología. El corte es de Malbec, Syrah, Cabernet Sauvignon y Petit Verdot. Una delicia.
Y se viene el séptimo. Aparece frutado en nariz, pero también algo herbáceo, con toques de pimiento verde. Además notas a vainilla y recuerdos minerales. Es más directo, un poco salvaje. En boca es fresco, tiene un gran cuerpo pero acompañado de una acidez muy presente y notas como a chocolate blanco y café. Tiene un toque amargo que complejiza y hace más disfrutable el paladar. Es más bien largo y en boca también se nota cierta rusticidad, pero para nada desagradable. Estamos hablando del Amalaya 2013 Corte Unico Finca San Isidro Barrel Fermented. Dice corte, pero es un Malbec en un 90 % acompañado por toques de Tannat y Cabernet Sauvignon. Muy buen vino el ícono de Bodega Amalaya que nos baja de las alturas de los Valles Calchaquíes esta belleza.
El octavo generó una explosión en cierta parte de la concurrencia. Finalmente un Cabernet! dijeron varios a coro. Si, es un Cabernet muy polentoso. Con sus pimientos verdes en donde deben estar. Con una extraña nota a espárragos que fue la comidilla del momento, Con unas frambuesas frescas engalanando el aroma y toquecitos de pimienta negra. En boca estructurado, pero franco y fresco. Muy largo, algo amargo al final. Expresión varietal buenísima y gran vinazo el Cassarena DNA Cabernet Sauvignon 2011 de Bodega Cassarena.
El último es el macho alfa de la degustación. Apareció a todo músculo. Marcela Martinez habló de hombres musculosos, yo traje el recuerdo de Silvester Stallone. Un robusto machote hecho vino. Ya desde la copa lo vemos moverse lento y untuoso. aromáticamente recuerda a mermeladas y café. A pimientos verdes también. A chocolate amargo. A tostados y orégano. Muy complejo. En boca te pega un patadón al paladar. Exquisito patadón te da y te deja la boca llena con una estructura fenomenal. Larguísimo y con gran trabajo de la madera. Se trata del Colomé 2010 Reserva Malbec de Bodega Colomé, otro salteño que deja la boca abierta. Fué el gran elegido por la mayoría de los asistentes al evento. Aplauso.
En conclusión. Excelente evento. Gran idea de don Depetris, gracias a él y a Rosario Vinos Exclusivos por la forma tan cálida con la que tratan a los asistentes.
Señores empresarios del vino, Anímense a éste tipo de degustación. No les dé miedo abrir esos botellones carísimos! Hay gente interesada en degustarlos. Hay quienes creemos que esas botellas es mejor abrirlas entre amigos y conocidos que solos en casa. Tomen coraje señores del vino y van a ver que la gente va a ir! No se amilanen. Este tipo de vinos son para tomarlos entre amantes del vino, en compañia, charlándolos, discutiéndolos, comparándolos. Así es como se disfrutan más.
Saludos, , volveré al barro de los vinos de super en cualquier momento, por ahora disfruto del limbo de los alta gama. Abrazo.
Como me gusta el vino y el Gran Capitan Kaller me avisó, no lo dudo y me mando con todo el entusiasmo. No todos los días se degustan éste tipo de vinos al mismo tiempo y en un mismo lugar. Una después de la otra y sin ver. Cosa de que el prejuicio no nos gane la partida.
La cita es el la esquina tradicionalísima del vino de Paraguay y Pasco. Rosario Vinos Exclusivos nos abre las puertas para ésta cata particular.
Tenemos una presencia importante en el evento. Está el Capitan, está Gustavo Tomassoni, el Sommelier del Pueblo, está Penélope Glamour (alias Marcela Martinez) y está el cada vez más jóven Dani Badalassi, con lo que entramos en cerrada formación para disfrutar del asunto.
Dirige la degustación el sommelier Octavio Zannarello con su estilo particular y personalísimo. Es un gusto escucharlo y seguirlo. Sabe el hombre...
Arrancamos entonces. Son nueve vinos, tenemos una planilla frente a nosotros. Hay que darles puntajes y describirlos en pocas palabras. Al final de la ronda inicial, elegimos tres que nos vuelven a servir y de allí elegimos el mejor para cada uno, que nos llevaremos a casita.
El primero ya me gustó. Buen color, no muy concentrado. Aromas primero frutales y lácticos. Frutas rojas y algo así como un durazno le siento, acompañado con notas a chocolate blanco. En boca es franco, fresco, con una acidez muy bien puesta, tomable, agradable, equilibrado y rico. Frutado también en boca, una buena presencia tánica y refrescante final. Más tarde Octavio dice que quizás le falte botella todavía. Puede ser cierto, me parece un vino que va a desarrollarse con el tiempo, pero esa expresión vivaz que tiene hoy en día lo hace muy disfrutable. Me gustó mucho el primer vino, lo elegí entre mis tres preferidos al final. Se trata nada más y nada menos que del Marcus Gran Reserva Cabernet Franc 2014 de Bodega Humberto Canale.
El segundo vino ya tiene otro aspecto. Es mucho más concentrado en color. Se mueve más pesado en la copa. Aromáticamente es intenso. Expresa una mermelada de ciruelas o frutillas muy machaza, concetrada, expresiones lácticas de su paso por madera, como chocolate amargo, toques apenas especiados. Después me aparece una nota dulce, como a "chicle". En boca es goloso, dulzón, casi empalagoso, muy untuoso y potente. De pasar suave y final muy largo. Un vinazo! El segundo fue señores el Foster Firmado Malbec 2010, ícono de la Bodega Foster y un caño.
El tercero no se queda atrás en concentración. En nariz aparece una nota floral junto a la mermelada, parecida al anterior. Acompaña una nota a café bastante intensa cuando se va abriendo, tiene una nariz muy golosa. En boca es de estructura media a alta, una entrada intensa, un poco tánico, una acidez bastante presente y un final largo que deja un retrogusto a café. Comparto con el capitán que a éste sí hay que esperarlo un tiempo más, porque todavía está un poco guerrero. El tercer vino es otro ícono, corte de Cabernet Sauvignon, Malbec, Petit Verdot y Cabernet Franc y se trata del Henry Gran Guarda N° 1 2011 de Bodegas Lagarde.
El cuarto es más amable. Concentrado también, en nariz viene con violetas frescas y ciruelas bastante maduras. Aromas dulzones y toques de orégano. "Si no es un malbec... " anoto en la libretita. El paso por madera también es evidente en notas tostadas. En boca es entrador, rico, medio dulzón al principio. Llena con una untuosidad agradable y tiene un final largo con recuerdos de violetas en el retrogusto. Da ganas de tomarlo. Pasa con todos los vinos de ésta bodega, es su personalidad. El cuarto es el Obra Prima Colección Malbec Gran Reserva 2011 de Bodega Familia Cassone.
El quinto es otra cosa. Ya desde la copa se nota la evolución. Tiene esos colores terracota que dicen que ha pasado largo tiempo desde que se embotelló. Anoto aromas. Hierba húmeda, café, membrillo, ceniza, algún toque mineral, especias, sobre todo especias mientras se va abriendo. Dulzon y espeso, pero agradable de oler. En boca es una seda, medio dulzón al principio, pero elegante, exquisito, disfrutable. Tomable, para descansar y dejarlo expresar. Una ricura evolucionada que fue mi segundo elegido de la noche. Se trata del Nómade Las Mulas Vineyard Syrah-Malbec 2007 de Tomás Achával. Estos vinos son geniales.
El que viene adelanto que es que que está en casa. Buena pinta en la copa, con músculo. Aromas ahumados, a café torrado, a frutas rojas, evolución en aromas dulzones, toques mentolados que lo hacen muy fresco, aromáticamente exquisito. En boca agradable, muy disfrutable pero con una acidez fresca que lo hace más tomable aún. Muy bueno, de alta gama evidentemente, pero en una búsqueda no tan concentrada como los anteriores. Me gustó y elegí el Lorca Inspirado Blend 2009 de don Mauricio Lorca, un mago de la enología. El corte es de Malbec, Syrah, Cabernet Sauvignon y Petit Verdot. Una delicia.
Y se viene el séptimo. Aparece frutado en nariz, pero también algo herbáceo, con toques de pimiento verde. Además notas a vainilla y recuerdos minerales. Es más directo, un poco salvaje. En boca es fresco, tiene un gran cuerpo pero acompañado de una acidez muy presente y notas como a chocolate blanco y café. Tiene un toque amargo que complejiza y hace más disfrutable el paladar. Es más bien largo y en boca también se nota cierta rusticidad, pero para nada desagradable. Estamos hablando del Amalaya 2013 Corte Unico Finca San Isidro Barrel Fermented. Dice corte, pero es un Malbec en un 90 % acompañado por toques de Tannat y Cabernet Sauvignon. Muy buen vino el ícono de Bodega Amalaya que nos baja de las alturas de los Valles Calchaquíes esta belleza.
El octavo generó una explosión en cierta parte de la concurrencia. Finalmente un Cabernet! dijeron varios a coro. Si, es un Cabernet muy polentoso. Con sus pimientos verdes en donde deben estar. Con una extraña nota a espárragos que fue la comidilla del momento, Con unas frambuesas frescas engalanando el aroma y toquecitos de pimienta negra. En boca estructurado, pero franco y fresco. Muy largo, algo amargo al final. Expresión varietal buenísima y gran vinazo el Cassarena DNA Cabernet Sauvignon 2011 de Bodega Cassarena.
El último es el macho alfa de la degustación. Apareció a todo músculo. Marcela Martinez habló de hombres musculosos, yo traje el recuerdo de Silvester Stallone. Un robusto machote hecho vino. Ya desde la copa lo vemos moverse lento y untuoso. aromáticamente recuerda a mermeladas y café. A pimientos verdes también. A chocolate amargo. A tostados y orégano. Muy complejo. En boca te pega un patadón al paladar. Exquisito patadón te da y te deja la boca llena con una estructura fenomenal. Larguísimo y con gran trabajo de la madera. Se trata del Colomé 2010 Reserva Malbec de Bodega Colomé, otro salteño que deja la boca abierta. Fué el gran elegido por la mayoría de los asistentes al evento. Aplauso.
En conclusión. Excelente evento. Gran idea de don Depetris, gracias a él y a Rosario Vinos Exclusivos por la forma tan cálida con la que tratan a los asistentes.
Señores empresarios del vino, Anímense a éste tipo de degustación. No les dé miedo abrir esos botellones carísimos! Hay gente interesada en degustarlos. Hay quienes creemos que esas botellas es mejor abrirlas entre amigos y conocidos que solos en casa. Tomen coraje señores del vino y van a ver que la gente va a ir! No se amilanen. Este tipo de vinos son para tomarlos entre amantes del vino, en compañia, charlándolos, discutiéndolos, comparándolos. Así es como se disfrutan más.
Saludos, , volveré al barro de los vinos de super en cualquier momento, por ahora disfruto del limbo de los alta gama. Abrazo.
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