Dia Mundial del Malbec en Wine Garden.

Esperaba pasar un tranquilo Malbec World Day 2018, quizás abriendo alguna joyita para festejar en la cena. Ocupaciones varias en medio de la semana y deberes paternales no me dejaban otra alternativa a pesar de las muchas opciones de festejo en la ciudad de pobres corazones. 
A eso de las 17 suena mi celular. Matias Galluccio asoma del otro lado del eter casi exigiéndome la presencia en el Malbec Tasting Day que organizaban con Rosario Doc en su nueva vinoteca llamada Wine Garden de Avenida Jorge Newbery, bastante cerca de casa. Sabía de éste evento y sobre todo la lista de etiquetas que pensaban abrir. Una especie de dream team de la distribuidora, oportunidad quizás única que me iba a perder. Expresé mi pesar e imposibilidad. Pero Matias contaba con un aliado de fierro, un tal Felipe que se hacía responsable de acompañar a la jóven Vera en demientras sucediera la cata soñada. Acepté sin demasiadas esperanzas de triunfo de la opción.


Así fué como nos presentamos puntuales en el nuevo local que queda en medio de una especie de centro comercial enclavado en un barrio residencial, lleno de verde y pájaros cantando. El lugar está muy bueno, cómodo y con un patio que se puede disfrutar mientras el clima lo permita. Las bombitas  alumbraron una noche especial para dejarse llevar por una cata que la rompió. 
La iniciativa es para aplaudir de pie un rato largo. Abrieron todo, o casi todo, lo mejor del portfolio de la distribuidora. 
"Podriamos haber cambiado las cuatro cubiertas del auto con la guita en vino que hay ahi", me comenta uno de mis compañeros de mesa al culminar la cata. "Pero no tendríamos la felicidad que tenemos ahora", le respondí.



Fueron 24 vinos divididos en seis tiradas de cuatro, todas a ciegas. Cuatro copas delante de cada uno y un muy buen servicio, tranquilo y sin apurar a los presentes, cosa de disfrutar y pensar cada muestra. El orden era más bien aleatorio. Estuvo también muy bueno que no se guardaron lo mejor para el final. Suele pasar en éstas catas maratónicas que cuando llega lo mejor uno ya tiene el paladar cansado y el alcohol va haciendo su efecto natural. Así que también se agradece que hayan aparecido durante toda la noche las bombas, esas botellas esperadas por todos. 
Rosario Doc también cuenta con un portfolio de bodegas que le permite mostrar variedad, novedades, experimentos extraños, diversas zonas geográficas y formas de vinificación. Así nos dimos una vuelta por muchas de las miles de caras que puede tener el Malbec a lo largo y ancho de la patria vinífera y sus miles de variables que le van encontrando los hacedores. 



Vamos entonces a los vinos, que para eso fuimos. Voy a intentar poner un par de palabras de cada uno, ya que la situación lo amerita y puntualizaré más en profundidad algunos que me gustaron mucho.

La primer tanda arrancó con todo.


El primero fue el Manos Negras Artesano Malbec 2014 Paraje Altamira. Expresando frutas frescas, aromas minerales y un poco herbáceos. En boca fresco y directo.
Seguimos con el Decero Malbec 2015 Remolinos Vineyard. Con la madera mucho más a flor de piel. Toques mentolados y en boca un poquitín amargo y voluptuoso.
La tercer parada fue el Esperando Los Barbaros Malbec 2015 de Matias Michelini. No es un vino para cualquiera. Aromas extraños como a membrillos y en boca una punzante acidez y un amargor final. Para quienes buscan sensaciones diferentes.
El cuarto fué el que más me gustó. Malbec Cinco Suelos del Proyecto Las Compuertas de Durigutti. Andan pululando por la web las fotos de ésta nuevo emprendimiento y me daban ganas de probarlas. En éste caso es el ejemplo de vino fresco, frutado en nariz como a frutillas, con presencia de aromas minerales y boca fresca y un tanino muy suave y delicado. Un vino que apunta a menor concentración y mayor frescura pero que no exagera con la acidez ni con lo "austero" que a veces nada dice. Muy bueno, aplausos para el cuarto vino.

La segunda tanda traía emociones fuertes:


Arrancamos con el Tinto Negro 1955 Vineyard 2013. Fresco y frutado, con algun dejo especiado. En boca ágil y tomable.
En el número 7 apareció la primer bomba atómica de la noche. El Malcriado 2014 es el vino ícono del proyecto Mosquita Muerta, uno de los emprendimientos de la familia Millán. Es un vino muy concentrado, con un gran paso por madera, pero fino. Se sienten las notas lácticas en conjunto con una mermelada muy fina de ciruelas y casis y tabaco y chocolate amargo y hasta recuerdos de te negro... En boca tiene una estructura expansiva, grande, untuoso, casi masticable y una frescura muy rica. Largo, disfrutable, especial. Un gran vino, que tambien tiene un gran precio...
Y sin solución de continuidad probamos el Clos de Chacras Gran Estirpe Malbec 2014. Aquí se sienten bien expresivas las notas a violetas que tanto se habla en el Malbec. Y también mermeladas. Grande también, más directo que el anterior, pero otro enorme vino para disfrutar.
Terminamos la vuelta con el Tomero Reserva Malbec 2015. Siempre rendidor, un muy buen malbec de manual.

Tercera vuelta:



Arrancamos con el Zaha Toko Vineyard Malbec 2015. Con aromas a fruta negra y mentol. En boca muy rico. Fresco y disfrutable.
Seguimos con una novedad. El Flintstone Malbec 2015 del proyecto Fuego Blanco del valle de Pedernal en San Juan. Sin demasiado expresión en nariz y un buen pasar por boca, seguramente necesita más botella.
El Crua Chan 2015 fue el siguiente y mi favorito. Expresivo, rico, con aromas a frutas y tomillo. Con la madera bien puesta. Una muy buena acidez fresca, disfrutable.
Terminamos con el Chaman Reserva Malbec 2015.


La cuarta tanda fue llamada como "el grupo de la muerte" dado los peso pesados con lo que nos enfrentamos.


Arrancamos con todo con el Teho Tomal Vineyard Malbec 2014. Especiado a tomillo y fresco como a arándanos. Tomable y directo.
Seguimos con el Angelica Zapata Malbec Alta 2013. Impecable como todo lo de la bodega. Madera muy bien puesta y corpulento.
El tercero me gustó mucho. El Seminare Malbec 2015. Es un vino oscuro en copa, muy concentrado. Con aromas muy finos y frescos a tomillo y mentol. Con una entrada en boca dulzona y fresca. Con recuerdos de frambuesa y una untuosidad acariciadora. Un vino muy fino como para tomar tranquilo, disfrutándolo y en su personalidad de clima más frío. Excelente.
Terminamos con el Buscado Vivo o Muerto Los Manzanos Los Chacayes Malbec 2014. Jóven, un toquecito herbáceo. Austero, nervioso y fresco.


Quinta entrada:


Y nos fuimos a Salta con el Estancia Los Cardones Malbec 2013. Morrudo y fresco vino salteño.
Seguimos con el Luminis Perdriel Malbec 2013. Aromas a cuero fresco, ciruelas y muy buena entrada dulzona en boca.
El tercero fué el Tonel 137 2013 de Bodega Los Toneles. Muy musculoso y estructurado. La madera integrándose al vino haciéndolo más tomable. El tiempo le va haciendo muy bien a éste vino, cada vez que lo pruebo se va poniendo más rico. Muy bueno,
Cuarto el segundo ejemplar de Malbec del Proyecto las Compuertas, el Malbec 1914 de Durigutti. Es más concentrado que su hermano de la primera tanda.

Y llegamos al final:


Arrancamos la tanda con el Finca La Escuela Malbec 2015 de Tinto Negro. Un muy buen Malbec directo y con personalidad. Fuerte y delicado a la vez.
El siguiente fue el Allamand Altamira Malbec 2013, mi recomendado en el AWB Descorcha de éste año del Valle de Uco. A la nota me remito Recomendaciones Malbec AWBDescorcha
Me sigue sorprendiendo el Callejón del Crimen Gran Reserva Malbec 2015. Un muy buen vino, rico y complejo.
Para el fínal apareció otra de las bombas de la noche. El Doña Silvina Reserva Malbec 2011. Un vinazo con todas las letras. Untuoso, con mucha madera, pero bien integrada. Se sienten aromas a cassis, violetas, cuero, especias, tabaco, recuerdos como a leche condensada, ciruelas, y siguen las firmas... En boca tiene una estructura enorme, refrescante, acariciadora. Otro ejemplo de que a ciertos vinos hay que darles algunos años para que terminen de expresarse y no largarlos tán jóvenes al mercado. Muy buen vino para terminar en un cerrado aplauso la Malbec Wine Tasting de Wine Garden!!!!

Tuve que partir raudo por los caminos del señor, pero los que se quedaron disfrutaron de un catering exquisito, preparado allí mismo y siguieron en una noche excepcional hasta que las velas no ardieron ni quedó una gota de Malbec en las copas de los presentes.
Aplaudo de pie ésta iniciativa de Rosario Doc porque demostraron que eventos de éste tipo se pueden hacer en Rosario y que solo hace falta poner lo que hay que poner para llevarlos a cabo.
Con el Capitán ya quedamos que en éstos días vamos a ir una tardecita a Wine Garden a tomarnos un Seminare. Vayan enfriándolo muchachos, ahí estaremos.
Algunos de las fotos que subí del evento las extraje del perfil de Facebook de Wine Garden y fueron tomadas por Pablo Denninno Photos, gran calidad en imágenes.
Quien preste atención, verá un concentradísimo bloguero a punto de dar su parecer de los vinos.
Salud a todos y que sigan los brindis!

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