En toda actividad humana hay precursores, ejemplos a seguir, héroes. El mundo del vino en Rosario tiene a Teresita Roveri que de alguna manera guía, corrije y señala caminos desde su reducto de calle Paraguay y Pasco, Rosario Vinos Exclusivos. Escucharla contar anécdotas es de alguna manera revivir la historia del vino en Argentina desde su particular visión.. Respeto y agradecimiento a ella por lo sucedido el viernes 13 de Abril de 2017.
Qué pasó ese día?
Ese día pasó que la Tere sacó de su "armario" varias botellas guardadas, añejadas y protegidas durante años. Y las sacó para brindarlas en una cata única y exclusiva para la Asociación Rosarina de Sommeliers.
Escribo éstas líneas con satisfacción. Está buenísimo que los profesionales del vino de Rosario se puedan juntar para hacer este tipo de eventos. Y total agradecimiento porque me permitan ser parte.
No puedo hablar de cada vino en particular. No llevé mi libretita al evento y no era mi intención desde un principio hacer un relato detallado de lo sucedido. Hubo varios que sí tomaron nota y seguramente puedan dar mayores precisiones que yo. (Ampliaré al respecto al final del texto).
Hubo vinos desde el año 1976 en adelante. Los hubo que se desarrollaron mejor que otros, pero en general todos muy bien.
Me gustaron especialmente un par. Pero insisto, no es la idea de ésta entrada entrar en detalles.
Igual pude sacar algunas conclusiones.
La primera es que si al abrir una botella encorchada en 1976 encontramos un vino todavía vivo y con ganas de dar satisfacciones, de alguna manera el mundo tiene todavía belleza para dar.
La segunda es que la totalidad de las botellas degustadas estaban en buen estado, lo que denota que
fueron vinos hechos para durar. Me pregunto qué será de las etiquetas tan renombradas y originales de hoy en día dentro de quince o veinte años. Dejo la inquietud para el futuro.
La tercera es la experiencia diferente e interesantísima que da tomar vinos añejos. La hermosa voluptuosidad que le agregan los años al vino es una experiencia increíble. Soy completamente incapaz de guardar una botella por años. Agradezco a la Tere por hacerlo. Como diría Gustavo: Gracias Totales!
Me gustó mucho el Paul Galard, el Angel Mendoza Cabernet Malbec de 1997 y el Luigi Bosca Fuori Serie Cabenert de 1995, aunque todos estaban perferctos y ricos.
Por último, párrafo aparte para el Santa Julia Magna Blanco de 2003 que nos tomamos. La evolución de los vinos blancos es un tema aparte. Me apasiona en particular porque los pocos casos de vinos añejos blancos que conozco fueron increíbles para mí. A tener en cuenta para el futuro.
Dejo las fotitos de todos los vinos degustados, una belleza.
Por último, quiero instar a los colegas sommelieres rosarinos a que se lancen a la aventura de escribir. Puedo certificar que no es difícil, ni engorroso, ni técnicamente imposible llevar adelante un blog como éste o similar. Sé que hay muchos y muy capacitados profesionales del vino en Rosario, y algunos de ellos, también dotados de poder comunicarse con la palabra escrita.
Me gustaría, estaría buenísimo, sería increíble, que podamos ser muchos los que escribimos sobre vinos en la Chicago Argentina. El mundo del vino necesita de la discusión, de la difusión, del intercambio de ideas que pueden generar la existencia de varios espacios de producción de contenidos simultáneos. Vamos muchac@s! Anímensen! La tecnología de blogger o wordpress es bastante sencilla. Escribir lleva un rato, tampoco es para tanto. Y estoy seguro que a varios de ustedes les encantaría.
Y si algún día nos pisamos escribiendo varios sobre lo mismo, mejor. Que cosa mas interesante puede haber al leer varias miradas de la misma cosa. La pluralidad de voces enriquece siempre el debate y la discusión.
Les dejo la inquietud y el desafío.
Volviendo al tema, buenísima la cata. Hermosas etiquetas degustadas y tremenda experiencia. Salud y en la semana seguimos con los festejos del Malbec. Va a salir nota con recomendados dentro de la movida de los Argentina Wine Bloggers. Veremos si les gustan las mías.
Abrazo a todos.
Qué pasó ese día?
Ese día pasó que la Tere sacó de su "armario" varias botellas guardadas, añejadas y protegidas durante años. Y las sacó para brindarlas en una cata única y exclusiva para la Asociación Rosarina de Sommeliers.
Escribo éstas líneas con satisfacción. Está buenísimo que los profesionales del vino de Rosario se puedan juntar para hacer este tipo de eventos. Y total agradecimiento porque me permitan ser parte.
No puedo hablar de cada vino en particular. No llevé mi libretita al evento y no era mi intención desde un principio hacer un relato detallado de lo sucedido. Hubo varios que sí tomaron nota y seguramente puedan dar mayores precisiones que yo. (Ampliaré al respecto al final del texto).
Hubo vinos desde el año 1976 en adelante. Los hubo que se desarrollaron mejor que otros, pero en general todos muy bien.
Me gustaron especialmente un par. Pero insisto, no es la idea de ésta entrada entrar en detalles.
Igual pude sacar algunas conclusiones.
La primera es que si al abrir una botella encorchada en 1976 encontramos un vino todavía vivo y con ganas de dar satisfacciones, de alguna manera el mundo tiene todavía belleza para dar.
La segunda es que la totalidad de las botellas degustadas estaban en buen estado, lo que denota que
fueron vinos hechos para durar. Me pregunto qué será de las etiquetas tan renombradas y originales de hoy en día dentro de quince o veinte años. Dejo la inquietud para el futuro.
La tercera es la experiencia diferente e interesantísima que da tomar vinos añejos. La hermosa voluptuosidad que le agregan los años al vino es una experiencia increíble. Soy completamente incapaz de guardar una botella por años. Agradezco a la Tere por hacerlo. Como diría Gustavo: Gracias Totales!
Me gustó mucho el Paul Galard, el Angel Mendoza Cabernet Malbec de 1997 y el Luigi Bosca Fuori Serie Cabenert de 1995, aunque todos estaban perferctos y ricos.
Por último, párrafo aparte para el Santa Julia Magna Blanco de 2003 que nos tomamos. La evolución de los vinos blancos es un tema aparte. Me apasiona en particular porque los pocos casos de vinos añejos blancos que conozco fueron increíbles para mí. A tener en cuenta para el futuro.
Dejo las fotitos de todos los vinos degustados, una belleza.
Por último, quiero instar a los colegas sommelieres rosarinos a que se lancen a la aventura de escribir. Puedo certificar que no es difícil, ni engorroso, ni técnicamente imposible llevar adelante un blog como éste o similar. Sé que hay muchos y muy capacitados profesionales del vino en Rosario, y algunos de ellos, también dotados de poder comunicarse con la palabra escrita.
Me gustaría, estaría buenísimo, sería increíble, que podamos ser muchos los que escribimos sobre vinos en la Chicago Argentina. El mundo del vino necesita de la discusión, de la difusión, del intercambio de ideas que pueden generar la existencia de varios espacios de producción de contenidos simultáneos. Vamos muchac@s! Anímensen! La tecnología de blogger o wordpress es bastante sencilla. Escribir lleva un rato, tampoco es para tanto. Y estoy seguro que a varios de ustedes les encantaría.
Y si algún día nos pisamos escribiendo varios sobre lo mismo, mejor. Que cosa mas interesante puede haber al leer varias miradas de la misma cosa. La pluralidad de voces enriquece siempre el debate y la discusión.
Les dejo la inquietud y el desafío.
Volviendo al tema, buenísima la cata. Hermosas etiquetas degustadas y tremenda experiencia. Salud y en la semana seguimos con los festejos del Malbec. Va a salir nota con recomendados dentro de la movida de los Argentina Wine Bloggers. Veremos si les gustan las mías.
Abrazo a todos.
Qué gran experiencia!
ResponderEliminarMe parece muy muy bueno el concepto y quede sorprendido con las etiquetas de años de los guardados por Teresita. Abrazo !!!
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